jueves, 23 de julio de 2009

Cénit

Yo no seré yo, muerte,
hasta que tú te unas con mi vida
y me completes así todo;

hasta que mi mitad de luz se cierre
con mi mitad de sombra

-y sea yo equilibrio eterno
en la mente del mundo:
unas veces, mi medio yo, radiante;
otras, mi otro medio yo, en olvido-.



Yo no seré yo, muerte,
hasta que tú, en tu turno, vistas
de huesos pálidos mi alma.

2 comentarios:

Carmen dijo...

Soy de san Roque (Cádiz) y te reconozco como integrante de los Castillas Zurita, pero este post me parece un tanto tétrico ¿no?
Besines.

Dyas dijo...

Pues vamos a ver, Carmen, esto no es tan tétrico, bueno, no es NADA TÉTRICO, si tenemos en cuenta lo que quiere decir Juan Ramón Jiménez.
¿Es seguro que lo has entendido?
Dale una vuelta más, por fa.